Me quebraste la ilusión y el alma,
porque puse empeño y pasión,
alimente mi mente y mi ser
desnudaste mi devoción
descalzaste mis pensamientos.
Nadie está preparado
nadie puede aceptarlo
mas cuando se alimenta la fe
y se libera el alma
se cubre la sonrisa
se matan las esperanzas.
Nadie puede aceptar
un adiós sin brillo,
un adiós de hielo
un adiós tan frío.
Mas ahora callo, no hablo
congelo sus frases
porque si hablo reviento
mejor no recordar
estos malos momentos
hagamos idea que todo paso.
Nadie está preparado
para escuchar sin esperar
lo que no es deseado
lo que no se espera
un mal paso, un adiós.
De los que causan el pánico
y las dudas se estremecen
de los que llegan directo
en contra de la corriente.
De los que rompen toda esperanza
solo es idóneo el adiós
no hacen falta palabras
a buen entendedor.
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